miércoles, 27 de junio de 2012

HECHOS PASADOS : ACERCA DE LA FERIA DE SAN PEDRO DE 1913

El sábado 28 de junio de 1913 dio comienzo la tradicional feria de San Pedro con el disparo de bombas reales y cohetes. Los dos festejos que mayor atractivo ofrecen en esta edición, fueron la aviación, con la participación del intrépido aviador Garnier y la corrida de toros en la que se lidiaron seis toros de la ganadería zamorana de Santiago Neches, para Rodolfo Gaona y Rufino San Vicente, Chiquito de Begoña.

Heraldo de Zamora, 27/06/1913

Los concursos y exhibiciones de aviación constituyen en las primeras décadas del siglo XX un importante acontecimiento por el que todas las ciudades, grandes o pequeñas, competían. Contratar a uno de estos pilotos pioneros de la aviación era el mejor atractivo para un buen programa de fiestas. Volar era todo un reto, y quienes lo intentaban lo hacían con sus propios aparatos.

La corrida de toros resultó regular, algunas informaciones lo atribuyen a las ínfimas condiciones del ganado, salvando a los diestros, mientras que Un Cojo sin muleta, lo atribuye principalmente a los matadores, Gaona porque tenía miedo por el peso y tamaño de los toros y Chiquito de Begoña porque se encontraba convaleciente de una pulmonía.
El quinto toro, permitió a Gaona lucirse y obtener una ovación y el sexto toro tuvo que ser fogueado con las banderillas de fuego, suprimidas en el reglamento de 1952, y que en la actualidad están sustituidas por las banderillas negras. Las banderillas de fuego se aplicaban para castigar a los toros que no se habían dejado picar bien, incorporaban una carga de pólvora con una mecha que al ser clavadas prendía el explosivo, achicharrando la piel del toro y detonando unos petardos que atronaban los oídos.

La afluencia de forasteros fue extraordinaria, y durante la mañana del día 29, festividad del santo, infinidad de forasteros llegados de todos los pueblos de la provincia recorrieron las diferentes ferias, la de los ajos en la plaza del instituto, hoy plaza de Claudio Moyano y la de los aperos de labranza, en la plaza del cuartel de caballería en el barrio de la Horta.
Por otra parte, la feria de ganado mular, caballar, asnal y vacuno se vio desanimada, realizándose escasas transacciones.
Hoteles, fondas, cafés y casas de comidas registraban la gran aglomeración de visitantes, y los comercios se vieron llenos de público durante toda la mañana.

Señalar como anécdota que durante la madrugada, el toro destinado a sobrero, y que finalmente fue lidiado en tercer lugar, penetró en la cuadra de caballos por una de las ventanas allí existentes y remató a seis de los animales encerrados. Después pasó a las habitaciones del conserje señor Pedrero, donde arremetió contra la cama en la que dormía el joven Virgilio Pedrero San Vicente, ocasionándole un varetazo en el muslo derecho que careció de importancia.

El picador El Cid, fue trasladado al Hotel Suizo en un coche por padecer una conmoción cerebral a consecuencia de un golpe que le propinó uno de los toros lidiados.

El día 1 de julio el Heraldo en un artículo editorial afirma:

Ha quedado demostrado hasta la evidencia que la propaganda periodística influye en el bien general de los pueblos a la vez que les proporciona elementos de vida.
La campaña que por espacio de treinta días ha venido haciendo HERALDO DE ZAMORA, en favor de la corrida de toros verificada el día de San Pedro y mas tarde de la aviación, han dado grandes frutos y por ello hemos sido felicitados.
Con nuestra propaganda, hemos conseguido y esto no es jactancia, que el día 29 del pasado junio, nos visitasen millares de forasteros. que el comercio, el cual atraviesa hondísima crisis, realizara muchas ventas; que las casas de comidas vendieran todas las existencias, y por último, que al circo taurino acudiese mucho público.
Este fue nuestro objetivo, y lo vimos coronado por el éxito.
De lo hecho no nos arrepentimos y siempre que vengan ocasiones como la actual, haremos lo propio, convencidísimos de que así defendemos los intereses del Comercio, la Industria y en general de la población.
Los que ayer esperaban recibir emociones al reseñar nosotros el festival taurino, vieron sus propósitos chasqueados; somos zamoranos y como tales gustamos de que si arde la casa no se vea el humo.
Quien piense de otra forma, siendo Zamorano, no es amante de la patria chica y hay que declararle enemigo del pueblo que le vio nacer.
Responda el comercio y la población entera, si la campaña mantenida por nosotros en el HERALDO acerca de la feria de Sin Pedro, ha sido perjudicial a sus intereses
Nosotros tenemos la satisfacción de que sólo elogios ha merecido nuestra labor y que contamos con la confianza del Comercio, por el cual estamos dispuestos a quemar hasta la cartuchera.
Que conste.”

lunes, 25 de junio de 2012

SAN PEDRO 1913

Fin de la campaña.


No merece los honores de una reseña larga y detallada, el festival taurino que ayer tarde se celebró en el coso de la explanada del Matadero.
El revistero no quiere meterse en disquisiciones acerca del resultado de la corrida, porque si así fuera, tenía que empuñar en la diestra un fuerte látigo y arrear en firme contra todos los elementos que integraron el espectáculo.
Así, pues, saldré del paso, propinando a la revista un golletazo más descomunal, que los que ayer vimos dar al gran Gaona, el rey del canguelo.
Y vemos con la dichosa corrida.

A la plaza.

A las cuatro en punto de la tarde la caravana heraldista, partió del Bar Águila en un espacioso ómnibus de los que poseen los hermanos Pepe y Tomas Pintas.
Cundo llegamos al circo, en el ruedo, la brillante banda del regimiento Toledo, dirigida por el reputado maestro don Leandro Rodríguez interpretaba de forma magistral una preciosa joya mereciendo estruendosa salva de aplausos, que arreció, cuando se escucharon las castizas notas del pasodoble Gallito.
¡¡Olé!! por los músicos del regimiento Toledo.
Una vuelta al anillo y mutis.
Los cofrades ocupamos todos nuestras respectivas localidades en el tendido número 2, al mismo tiempo que entraba en la presidencia, el segundo teniente alcalde, señor Calonge.
En el circo reinaba la alegría, el bullicio que proporciona la fiesta nacional.
Había buena entrada a la sombra y regular al sol, para no perder.
De mujeres, no hablemos. Las había de buten, de chipén, con cada mantón de Manila, que eclipsaba a los que confeccionan los hijos del Celeste Imperio.
Y el presidente sacó el pañuelo: dos alguacilillos montando magníficos y briosos corceles nos aburrieron de lo lindo con sus proezas de equitación y las cuadrillas capitaneadas, por Rodolfo Gaona y Chiquito de Begoña hicieron el paseo.

Los toros.

Comienzo confesando ingenuamente que los seis burós que mandó don Santiago Neches no dieron juego a excepción de los lidiados en primero y quinto lugar, dos bichos que en el primer tercio, fueron codiciosos, pegaron en firme y llegaron a la suprema hora, como peritas en dulce.
Lástima de mejor lidia, y los dos toros, si no resultan de bandera, hubieran competido con los de mejor raza andaluza.
Los restantes, fueron tardos en varas, debido a la mala dirección de plaza, pues no se oculta a ningún espectador, que los de aúpa, cotizaban el hule a gran precio, y no vinieron a Zamora nada más que a pasear, en aquellas sardinas tísicas que nos brindó la empresa de caballos.
Ninguno de los varilargueros se colocó en su sitio, y de esta forma, el mejor toro vuelve la cara y se hace acreedor a una sección de fuegos artificiales, como le ocurrió al lidiado en sexto lugar.
Entre los seis toros jugados ayer, tomaron treinta varas, y hubieran metido más la cabeza si la lidia se hace como lo mandan los cánones taurinos.
Lamento, querido colega, lo ocurrido, y hago votos porque los cornúpetos destinados a morir en la Plaza de San Sebastián tengan mejor suerte que sus compañeros de ayer.
En fin, cambiaré de tercio, relegando al panteón del olvido la lidia que se dio ayer a los seis animalitos y paso a entendérmelas con

Rodolfo Gaona.

El indio más indio que existe en el Universo, vino a Zamora, mal impresionado del ganado.
En un rato de charla que el revistero mantuvo con Rodolfo en el cuarto número uno del Hotel Comercio, pudo comprender que Gaona, tenía eso que se llama miedo.
Venía a Zamora por las pesetas y le importaba poco la afición.
Gaona sabia que había cuatro toros de peso y hasta llegó a señalar número de arrobas, ¡horror! y bajo esta impresión se coloco el traje de luces, por cierto bastante fúnebre, y se fue a la plaza a hacer lo que todos le vimos.
Tirarse a matar sin preparación, ni perfilarse.
Ni suicida fue ayer, porque cuando entraba a matar aprovechaba todas las ventajas.
Demostración de ello, fueron los pitos que escuchó y la llamada a la Presidencia, para imponerle quinientas pesetas de multa.
¿Estamos de acuerdo?
Pues bien, Gaona sacó la espina en el quinto toro.
En el marmolillo aquel, que seguía a los capotes como manso corderillo realizó elegante preparación en banderillas, cambió, agarró pares superiores, alguno de poder a poder y se le aplaudió.
Con la muleta hizo algo, no todo lo que sabe y la labor resultó embarullada, no todo lo limpia que merecía el bicho.
Con el estoque, no quiero acordarme de lo que hizo, mechó y atravesó a los toros y los tres que le correspondieron se murieron aburridos y renegando de su suerte perra.

Rufino San Vicente.

En condiciones malísimas venia el Chiquito a Zamora. Hízolo por complacer a los zamoranos de los que guarda gratos recuerdos y en compañía de su doctor, por si durante el viaje empeoraba.

Rufino está en la convalecencia de una grave pulmonía, que no ha muchos días puso en peligro su vida, y en estas condiciones salió a la plaza.
Esto en verdad, no justifica lo vulgar que ayer estuvo frente a los toros, pero aminora las censuras.
Hizo algunos quites, rematándolos con elegancia, dio varios pases con maestría y agarró buenos pinchazos.
El begoñés no hizo más que salir del paso.
Lo siento, porque Rufino
Hay que restablecerse, niño, y ganar palmas acercándose a los toros.

La gente de a pie.

Corramos un velo.
Quisiera el revistero acercarse a la realidad al hablar de la labor del personal que componían las cuadrillas de Rodolfo Gaona y Rufino San Vicente.
Ignorantes con el capote, detestables con los palos.
Séales la tierra leve.

La presidencia.

Siento en el alma decir al amigo Pepito que en algunos momentos estuvo en brazos de Morfeo en tan dulce siesta, que los espectadores pensábamos en marchar a Tetuán por monas.
En otros instantes, caminó a 70 por hora, y eso le ocurrió en el sexto toro, al ondular el pañuelo rojo.
No paso, querido Pepe, a discutir si estuvo bien o mal fogueado Tomatero; otras cosas hemos visto peores; lo que digo es, que si los burós lidiados en segundo, tercero y cuarto lugar se libraron del tuesten, lo mismo pudo ocurrir con el sexto.
Zamorano, ante todo; y no va más.
El servicio de Plaza, detestable.
En el reglamento de toros hay un artículo que habla de los avisos que se envían a los matadores cuando se retrasan en el último tercio; ayer quedó incumplida esta disposición en el tercer toro.
¿Para cuando se dejan los mansos?

El desfile.

Terminado el festival; el público, aburrido, desfiló en diferentes direcciones, y los cofrades heraldistas nos dirigimos al chalet del café de París, en la Avenida de Requejo, donde concluimos de refrescar, pues conste que en la Plaza no faltó, como a todo quisque, la simbólica bota de limonada y los riquísimos fiambres que expende Gerardo Inestal.
Concluido el refresco, los cofrades nos despedirnos, haciendo votos de que el año próximo, nos veamos también reunidos para correr otra juerguecita.
Y conste que fuimos trece los que constituíamos la caravana.

Un Cojo sin muleta.
Heraldo de Zamora, 30/06/1913

viernes, 22 de junio de 2012

SAN PEDRO 1913 : EXPECTACIÓN Y ENTUSIASMO

La expectación creada entre los aficionados por el brillante cartel taurino que ha de celebrarse la tarde del día de San Pedro de 1913, aventura la llegada de numerosos forasteros. A juzgar por el considerable número de localidades solicitadas por aficionados de Salamanca, Astorga, Toro y Benavente se prepara una gran entrada para la corrida de toros.
Una prueba de que el entusiasmo no es un delirio, es que según afirma el diario, a Zamora llegarán ese día muchos automóviles pues hay pedidos garajes para cuarenta y siete coches.

Y como se espera una extraordinaria afluencia de forasteros, en el matadero municipal se han sacrificado unos cientos de corderos y se espera que al día siguiente se sacrifique otro rebaño numeroso.

Gaona ya ha telegrafiado al elegante Hotel Comercio, en la céntrica calle Viriato, para reservar alojamiento tanto para él, como para su cuadrilla.


CAIRELES Y PITONES

Pasado mañana descansarán en los prados de Merendeses los siete toros que envía don Santiago Neches, para que Gaona y Chiquito de Begoña, se las entiendan con seis la tarde del día 29 festividad de San Pedro.
El encierro se verificará a hora competente; es decir, de madrugada.

***

La Compañía de los ferrocarriles del Oeste ha dispuesto que los billetes de la tarifa temporal 3, sean valederos para todos los días de feria, y que el día de San Pedro circule entre Zamora y Salamanca un tren discrecional, que saldrá de nuestra estación a las 9 y 20 de la noche para llegar a la ciudad del Tormes a las 11 y 30.

La combinación no puede ser más conveniente, pues los salmantinos que llegan en el tren 111 a las 12 y 45 minutos para presenciar la corrida, podrán regresar a sus casas en el de las 9 y 20.

***

La corrida del día de San Pedro será presidida por el segundo teniente alcalde don José María Calonge, por delegación del señor Moyano Salvador.

La presidencia será inflexible en la cuestión de las puyas, castigando cuantas infracciones se cometan en el circo taurino.

Un Cojo sin muleta
Heraldo de Zamora, 26/06/1913

jueves, 21 de junio de 2012

EL SORTEO DEL CONCURSO DE CUPONES

Tras una intensa campaña de promoción, Heraldo de Zamora celebra el sorteo de los diez premios que dan derecho a formar parte de una caravana festiva que dirigida por J. Puyitas y Un Cojo sin muleta, llevará a los premiados a tomar el vermouth, desplazarse hasta la plaza de toros en coche de caballos, asistir a los toros y tomar a la finalización del festejo taurino, un refresco en el chalet de la Avenida Requejo.

Los agraciados por la fortuna son el profesor de primera enseñanza de Villarrín de Campos, Raimundo Ramos, el bizarro sargento del regimiento Toledo, José Cornejo, Ricardo Cardona, Francisco Izquierdo, Luis Manso, Jesús Gallego, Gaspar Merino, de Zamora; Vicente Ramos de Villarrín de Campos, Laureano González de Moraleja del Vino y Manuel Fontán de Tábara.

Junto a ellos ocuparan el tendido número 2, cincuenta cofrades honoríficos que han decidido costearse personalmente las localidades, para no perderse la juerguecita de la caravana.

A LOS TOROS, GRATIS

Nuestro sorteo.

Como teníamos anunciado, ayer a las doce celebramos el sorteo para regalar a los lectores diez tendidos de sombra para la corrida del día de San Pedro, que en nuestro circo taurino harán proezas con los toros del ganadero zamorano don Santiago Neches, el indio Gaona y el begoñés Rufino San Vicente.

El interés despertado por nuestro concurso excede a toda ponderación. Solo hemos de decir, que jugaron en el sorteo

2.984

números, que representan un éxito, ya que resulta un total de

14.920

cupones, el cual nos anima a perseverar en el camino de seguir haciendo nuevos regalos en análoga forma.

A las once de la mañana, con objeto de recordar el público la hora del sorteo, una banda de música recorrió la población, dirigiéndose a la Avenida de Requejo, donde con antelación había ya infinidad de personas esperando a la hora suprema, de los desengaños y las verdades.

Disparo de cohetes y voladores anunció que iba a comenzar el acto.

En el templete se colocó la urna que contenía los 2.984 números, estando presentes nuestro director, varios redactores, el administrador, representación de la autoridad y algunas otras personas. Seguidamente, Un Cojo sin muleta, dirigiéndose a la concurrencia, manifestó que si alguna persona de entre las allí reunidas deseaba hacer el recuento de papeletas o presenciar en el mismo templete el sorteo, podía pasar, porque era llegado el momento de conocer quienes serían los agraciados.

Conformes todos los presentes de las legalidades de que eran testigos, procedióse a la insaculación de los diez premios, que fueron sacados de la urna por los niños siguientes: María Ochoa, Luisa Calamita, Fernando Rueda, Benigno Rueda y Paquito Prieto, quienes cantaron los números que extraían en
la forma siguiente:                                    


2.712          2.735
   758          2.385
2.530          2.383
1.452             401
2.236          1.155

cuyos poseedores de tales bonos pueden pasar por esta Administración con el fin de recibir instrucciones para formar la caravana que gratuitamente tomará vermouth el día 29 de Junio, asistiendo después a los toros, al refresco y demás obsequios que el HERALDO ha brindado a sus favorecedores.

Hasta la fecha, únicamente conocemos a dos agraciados en el concurso, que son: don Jesús Gallego y don Gaspar Merino, a quienes felicitemos por su suerte.

Ante la pizarra que colocamos en la fachada de la casa del HERALDO con los números premiados desfiló ayer un público numeroso cotejando sus vales.
Para terminar, nos felicitamos del éxito obtenido, y ofrecemos al público continuar incansables la serie de concursos que tenemos en cartera.

Como aclaración precisa, deseamos repetir lo que ya hemos dicho: que si la fortuna ha favorecido a algún chiquillo en manera alguna podemos nosotros responder de sus travesuras, ni tampoco Un Cojo sin muleta y J. Puyitas pueden ir en la caravana pendientes de los desasosiegos de los niños, que están en su derecho brindando la localidad a quien gusten. Con tiempo hacemos la advertencia, a los efectos oportunos.

Y como por la víspera se conocen los santos, ponemos en conocimiento de los favorecidos por la suerte, que con el fin de montar el servicio con todas las de la ley, no deben olvidar que el día 28 a las doce de la mañana deben estar recogidos los carnets de identificación de cofrade heraldino, pues el que no pase por esta redacción a proveerse del codiciado y honroso título, se entenderá que renuncia a tal distinción, disponiendo nosotros entonces de la prebenda.

Conque ya lo saben los dichosos mortales, a quienes la suerte les fue propicia. Les esperamos.

El próximo concurso.

Consistirá en obsequiar a nuestros lectores con unos preciosos relojes alemanes, de sobremesa, que se hallan expuestos en los escaparates del comercio de don Fernando Rueda, calle de Santa Clara, número 2.
Pronto saldrá el primer cupón. Preparen las tijeras nuestros lectores.

Heraldo de Zamora, 25/06/1913

martes, 19 de junio de 2012

UNA EXCURSIÓN A LA GUADAÑA (y II)

A fin de comprobar in situ a los toros que una semana después serán lidiados en la corrida de San Pedro, una representación de Heraldo de Zamora, formada por Un Cojo sin muleta, el administrador del periódico, Julio Calamita, Sentimientos y el autor del artículo J. Puyitas, se trasladan hasta la dehesa de La Guadaña, donde pacen las reses de la ganadería de Santiago Neches.

Les acompañan en la visita el juez municipal de Granja de Moreruela, Juan Manuel Rodríguez y el médico de la misma población y colaborador de Heraldo, Herminio Esteban Pinilla y el vaquero de la ganadería señor Paulino.


UNA EXCURSIÓN A LA GUADAÑA


Nuestra opinión.

Decíamos anteayer que el veterano vaquero señor Paulino nos interesó un «razonado dictamen» sobre el detenido estudio que hicimos de los seis morlacos de la ganadería de don Santiago Neches, y como agradecimiento obliga, vamos a permitirnos emitir nuestra más sincera opinión, siquiera no se nos oculte, que para profetizar con acierto en estos intrincados laberintos de la tauromaquia, es medida aconsejada por la prudencia la de echar mano al obligado cliché de «Dios sobre todo».

Cuando a no gran distancia de aquellos siete hermosos ejemplares, con ánimo sereno conversaba con usted, mi respetable anciano, ya pudo apreciar que el concepto que me mereció la colección no pudo ser más favorable, como probaré.

De los siete animalejos, seis, cuando menos, pesan sus 27 arrobas por cabeza; el otro el majo Majito, debe traerse sus 24, bien corridas.
Todos ellos son finísimos, de pelo más que fino, bien armados, largos, y en una palabra, abuelito, de inmejorable presentación.
La historia, según usted, no puede ser más honrosa: en la tienta alcanzaron más brillantes calificaciones que muchos estudiantes presumíos.
Tampoco, que usted sepa han hecho cosas feas durante el internado en la dehesa.

Ahora ¿ llevarán gasolina en el motor?
¡Dios sobro todo! Repito.

Lo que si desde luego afirmo, sin temor a ser desmentido, es que a la corrida que el concienzudo y escrupuloso ganadero don Santiago Neches, envía para ser lidiada en la plaza del pueblo que tanto le quiere, no la aventajará ninguna, así, absolutamente ninguna, en excelente y admirable presentación: nunca con más verdad que en esta ocasión puede la Empresa anunciar pomposamente y hasta con orgullo que en la tarde del próximo domingo 29, se lidiarán seis hermosos y escogidos toros.

Esta es mi humilde opinión, que someto a «lo que resulte en dicho día» y emito en mi cuartelillo de la redacción de HERALDO DE ZAMORA.
Y cumplido con este, para mi gratísimo deber, continuo relatando cuanto hicimos, vimos, comimos y demás, en aquella inolvidable excursión a La Guadaña.

Un banquete.

Contentos, alegres y sobre todo entusiasmados con la soberbia corrida que veíamos en perspectiva y haciendo los naturales comentarios, encaminamos nuestros pasos hacia el comedor que las felices iniciativas de Juan Manuel y Herminio habían improvisado en uno de los lugares más pintorescos de la dehesa, en una frondosa alameda, próxima a la fuente y desde donde divisábamos un panorama encantador.

Decir que el banquete fue suculento y admirablemente servido es innecesario; en Herminio y Juan Manuel corren parejas sus grandes cariños para con los amigos, con su reconocida esplendidez.

Y para que nada faltase hicieron los honores de la fiesta la bella y distinguida señorita Petronila, hija de nuestro querido amigo Juan Manuel, acompañado de otra graciosísima joven, salmantina, nieta del venerable señor Paulino.
Es de justicia que demos publico testimonio de agradecimiento hacia la saladísima María, la imponderable doméstica de don Herminio, por lo esmeradamente que sirvió el banquete: de esa graciosa morenita, tienen mucho que aprender los camareros de ciertos hoteles.
Terminada la comida, fuimos a despedirnos cortésmente de los siete mocitos de Neches haciendo votos porque, en la tarde del domingo queden en el terreno que deben.
Solemnemente nos ofrecieron que así lo harían.

Nuestro regreso.

En la bonita cesta de los hermanos Pintas y un precioso carruaje del amigo Herminio, nos trasladamos a casa de éste, donde su amable y distinguida señora nos obsequió con un espléndido lunch, reiterando sus deseos de que no tardando organicemos otra nueva excursión a aquellos parajes donde tantas y tantas atenciones se nos dispensaron y que agradecemos de corazón, deseando se nos depare ocasión propicia de poder corresponder a ellas como se merecen.
A todos nuestros compañeros de excursión y sus apreciabilísimas familias, envía HERALDO DE ZAMORA las más expresivas gracias.

J.
Heraldo de Zamora, 25/06/1913

lunes, 18 de junio de 2012

UNA EXCURSIÓN A LA GUADAÑA (I)

Una representación de Heraldo de Zamora, se traslada hasta la dehesa de La Guadaña, donde se encuentra enclavado el monasterio cisterciense de Moreruela, distante unos cuatro kilómetros de la población zamorana de Granja de Moreruela.
Cuenta la dehesa con pastizales altos y bajos y una bellotera en la que pacen las reses de la ganadería de Santiago Neches.

Santiago Neches Alaiz crea su ganadería en el año de 1902, para ello compra una punta de vacas bravas al duque de Veragua y un toro de la afamada ganadería de Conradi, llamado Comediante.
La primera corrida que se lidió de esta ganadería fue el 23/08/1908 y un toro llamado Sordito, cárdeno y cornigacho acabó con la vida del infortunado diestro Hilario González, Serranito.
En general eran toros de preciosa lámina, de gran bravura y enorme poder, muy duros para la lidia.
Aunque no ofreció muchas corridas, algunos de sus toros alcanzaron gran popularidad. Además del ya citado Sordito, el 19 de septiembre de 1909, Centinelo, en la feria de Valladolid tomó nueve varas, mató cinco caballos, fracturó el brazo al picador Pagán e hirió al espada Platerito. El mismo día Estrechuras, también obtuvo una gran nota por su bravura.
Célebre fue también Solitario, muerto a manos de Chiquito de Begoña en la feria de San Pedro de 1910 y Clavelino, en la feria de 1913 que finiquitó Gaona después de una excelente lidia.
La ganadería fue vendida a los señores Rivas de Salamanca en 1914.



Una excursión


En nuestro deseo de informar a los amables lectores del HERALDO DE ZAMORA de todo cuanto pueda tener relación con la brillante corrida de toros que se celebrará el día 29 de los corrientes, habíamos decidido trasladarnos un día a la hermosa dehesa de Granja de Moreruela para conocer de visu los seis buenos mozos que el simpático ganadero don Santiago Neches nos envía y que sin duda alguna, honrarán una vez más la divisa amarilla y blanca, de tan envidiable historia en el mundo taurino.
Ayer tuvo lugar la excursión, de la que guardaremos indelebles recuerdos, porque como verá el pacientísimo lector, la fiesta resultó digno vermout, de las que se avecinan.

Y vamos al cuento:
Serían las dos de la madrugada y en una cómoda cesta tirada por tres briosos caballos, enjaezados con el gusto que es peculiar en los hermanos Pepe y Tomasito Pintas, cuando de dar brillo a la Prensa se trata, salimos de esta vetusta ciudad, Un cojo sin muleta, Sentimientos, nuestro administrador, el indispensable dueño de los parneses y mi anciana y respetable (¡vaya si lo es!) personilla, y a pesar de los pesares y del vientecillo un tantico molesto que reinaba, no por ello dejó de hacerse más agradable la travesía, cantándome por too lo jondo, unas marianitas que dicho sea con modestia, para si las quisiera Amalia Molina.

Y jipío aquí, iolé! allá, y alguno que otro melodioso ronquido de este cojo sin igual, aterrizamos en las proximidades de las moradas que en Granja de Moreruela habitan nuestros entrañables amigos don Juan Manuel Rodríguez y Herminio Esteban Pinilla, juez municipal y médico, respectivamente.

¡Tierra! ¡tierra! gritaba cual nuevo Colón, el desaborío y helado Sentimientos; ¡desayuno, desayuno!; y parada y fonda; dijo a grandes gritos don Herminio, que por una indiscreción de su morena y saladísima doméstica María, había tenido noticia de la llegada de tan ilustres viajeros.

Y aún cuando la hora no podía ser más intempestiva (cinco mañana) como el culto colaborador del Heraldo señor Pinilla y su distinguida esposa son pródigos hasta la exageración en atenciones para con sus amigos, los excursionistas, una vez cambiados los capotes de paseo (el polvo de la carretera nos había puesto verdes) y previos, como es natural, los saludos de rúbrica, aceptamos la invitación y dimos con nuestros cuerpecitos en el cómodo y elegante comedor de la casa, do fuimos obsequiados como saben hacerlo tan bondadosos dueños.

Juan Manuel, o lo que es lo mismo, el todo de La Granja porque él, porque se lo merece, es el todo, llegó, nos saludó y se incorporó, para no abandonarnos en todo el día.

A la Guadaña.

Con tan grata compañía, como es la de Herminio y Juan Manuel, partimos para la dehesa, donde moran los seis hermosísimos ejemplares de la fábrica de Neches, que el día de San Pedro han de ser lidiados en nuestro coso.

Cuando llegamos a la finca del señor Semprún, ya nos esperaba el veterano vaquero, conocedor como ninguno, de la ganadería, el señor Paulino, ingeniero director de la fábrica, cuyos productos se cotizaran en el mercado del día 29, a los elevados precios que les son merecidos por su excelente calidad.

El viejo charro, amable como lo son todos los hijos de la bendita tierra salmantina, se prestó gustoso a servirnos de cicerone, y los chicos de la Prensa, que somos muy pedigüeños naturalmente, comenzamos por exigirle que nos llevase a honesta distancia de los morlacos, pero no tan honesta que impidiese al Cojo evitarse una cogida, si por acaso, alguno de los nenes de su colega el ganadero quería hacerle una caricia.

-Vengan ustedes conmigo y completamente tranquilos- dijo el anciano ledesmino- acortaremos la distancia lo bastante para que don Puyitas pueda ver de arriba a abajo los bichos, porque estos me obedecen mas, mucho más, que los deputaos de Romanones.

Julio Calamita, que no morirá de cornada de gallina, se mostró un tanto receloso, pero los demás excursionistas que no es porque yo lo diga, somos unos guapos, penetramos en una frondosa alameda donde tranquilos reposaban unos y pastaban otros, ocho grandes, enormes torazos de preciosa lámina, superior herramienta, pelo finísimo y de sus 27 ó 28 arrobas por barba.

-Son castillos, dijo asombrado el de sin muleta.
-No; le repliqué, catedrales de Pisa que al que pisen, ¡séale la tierra ligera!
Y ¿cuáles de estos monumentos serán los que se lidien, señor Paulino -le pregunté:
-Tenga, señor Puyitas, las cédulas personales...

Laminito, número 46, negro cornicorto, hijo legítimo de legitima vaca veragueña: pesa sus 28 arrobas, tal vez más.
Tomatero, negro, con sus pequeñas braguitas; cornicorto; vendido por kilos, como la porcelana, valdría media docena de miles de pesetas.
Brujito, tiene la misma color que sus antecesores, no les va en zaga en eso de traerse libras, es bragado y escarchado.
Clavelino, del color de la tinta netamente negra, cornibajo y presume de tener arrobas, que ¡vaya si las tiene!
Majito; jabonero sucio, astifino, too lo que se llama un señor toro.
Según rezan los papeles del señor Paulino, Majito es nieto póstumo de la fábrica del excelentísimo señor duque de Veragua.
Me explicaré: Majito es hijo de una becerra (que fue) de la renombrada ganadería; primera becerra que pisó las tierras zamoranas, luego, si el árbol genealógico no miente... deduzcan ustedes las consecuencias.
Rondeño; negrito, como los ojos de mi morena, con dos velas y cirios interminables; debe traerse sus 28 arrobas, bien cumplidas.

¿Qué le ha perecido a usted esta tropa, me preguntaba con cierto aire de orgullo el respetable ingeniero?
-Eso merece punto y aparte, como hoy tengo que hacerlo, contando con el perdón de mis lectores, pues el regente es un tirano, la excursión exige minuciosos detalles y se impone la necesidad de continuar en días sucesivos, dedicándola la debida atención.

Así, que ustedes descansen, y hasta mañana.

J.
Heraldo de Zamora, 23/06/1913

jueves, 14 de junio de 2012

EN VÍSPERAS DE SAN PEDRO 1913

Siguiendo el mismo patrón que en otras ocasiones, a medida que se acerca la fecha de la corrida, se intensifica la promoción.

El domingo anterior a la corrida una representación del Heraldo tiene previsto visitar la dehesa La Guadaña, en las inmediaciones del Monasterio de Moreruela con el fin de comprobar in situ a los toros que días después llegarán a la dehesa de Merendeses, en el término de Molacillos (Zamora) donde esperarán el momento definitivo de ser trasladados a Zamora para ser lidiados en la corrida de San Pedro.




CAIRELES Y PITONES

En vísperas de San Pedro

Pocos son los días que faltan para la celebración de la gran corrida de toros, organizada para el día de San Pedro.
A medida que se acerca la fecha va en crescendo el entusiasmo por ver torear a Rodolfo Gaona, el torero mejicano que no tiene miedo a los toros por grandes que sean; al valiente Rufino San Vicente, Chiquito de Begoña, que viene con ganas de trabajar y conquistarse palmas.

El indio llegará a Zamora, según cartas que se han recibido, en el hotel Comercio, el día 28 por la noche, pues Rodolfo indica la conveniencia de descansar aquella noche, para después entendérselas desde muy cerquita, con los seis animalitos que envía el ganadero don Santiago Neches.

Los cornúpetos que han de lidiar Rodolfo y Rufino el día de San Pedro, saldrán de la dehesa de la Guadaña el viernes de la semana próxima y descansarán en los prados de Merendeses donde podrán verse durante todo el día del sábado.

Si el tiempo no lo impide y nuestras ocupaciones lo permiten, mañana Dios mediante saldremos los chicos del HERALDO para los fértiles prados de la Guadaña donde admiraremos los seis morlacos que han de pasaportar Rodolfo Gaona y Rufino San Vicente, la tarde del día de San Pedro.

Pasado mañana el revistero podrá ofrecer las partidas de bautismo de los burós, documentos que serán extendidos con todas las de la ley, por el popular conocedor de la ganadería, señor Paulino, hombre que nos referirá todo el historial de las seis catedrales que han de lidiar los arrojados y valientes matadores Rodolfo Gaona y Rufino San Vicente, Chiquito de Begoña.

Conste, pues, que los seis toros fabricados por el simpático ganadero señor Neches, serán picados, banderilleados y muertos a estoque por los diestros Gaona y Chiquito de Begoña con sus correspondientes cuadrillas, en las que figura el valiente Veguita, uno de los mejores peones que pisan los circos de España.

Esperemos que llegue el día para podar batir palmas a los coletudos astros y cantar un himno a la fiesta nacional.

Un Cojo sin muleta.
Heraldo de Zamora, 21/06/1913

miércoles, 13 de junio de 2012

FIN DEL CONCURSO POR CUPONES

Con una redacción confusa en cuanto al horario en que finaliza el canjeo de cupones, Heraldo de Zamora pone el punto final a esta primera experiencia en la que promociona la venta del diario adoptando una nueva técnica de ventas que consiste en la inserción de un cupón que puede ser canjeado por una participación en el sorteo de diez entradas a la corrida de toros de San Pedro.

El concurso finaliza a las siete de la tarde del día 23 de junio, y tienen previsto realizar el sorteo a las doce del mediodía del día siguiente, festividad de San Juan, en el paseo de la Avenida de Requejo.

Los diez lectores agraciados por la suerte tomarán vermouth en el Bar Águila Negra, después de la fiesta de la aviación, pasearán en coche, irán gratuitamente a los toros, refrescarán en el chalet de la Avenida de Requejo e irán al teatro a presenciar la actuación del notable transformista Rafael Arcos, acompañados en todo momento por los populares redactores del diario, J. Puyitas y Un Cojo sin muleta.

El concurso ha resultado de gran éxito, pues además de las ventas del diario, la promoción de la corrida ha conseguido que la imprenta de Enrique Calamita, propietario del periódico repartiera más de 50.000 anuncios de la corrida, en la que Rodolfo Gaona y Chiquito de Begoña matarán seis hermosos toros de la ganadería zamorana de Santiago Neches.

El sorteo será público, y desde las páginas del diario se suplica la asistencia al acto de cuantos han tomado parte en el concurso a fin de que den fe de la legalidad del mismo.

Los números agraciados serán expuestos en una pizarra colocada en la fachada de la redacción, en la calle Santa Clara. Como el día 24 es festivo y no se publica el diario, los números aparecerán publicados al día siguiente.

Es tal el entusiasmo reinante entre la afición, que muchas personas han solicitado acompañar a la caravana del Heraldo, previo pago de la entrada, naturalmente, por lo que a tal fin han reservado cincuenta localidades inmediatas a las que han de ocupar los agraciados y que se expenderán en la administración del Heraldo a los precios correspondientes.

CAIRELES Y PITONES

Nuestro concurso.

Mañana Dios mediante, termina nuestro concurso para asistir gratuitamente a la corrida de toros del día de San Pedro.
Publicaremos el último cupón y el canjeo podrá verificarse hacia las siete de la tarde del día 23, hora que comenzaremos los preparativos del sorteo que tendrá legar en la mañana del 24 en el templete del paseo Avenida de Requejo.

Es necesario fijarse que el canjeo de cupones termina a las cinco de la tarde del día 23 de los corrientes y no admitiremos los que se presenten después de dicha hora, pues necesitamos tiempo suficiente para preparar el sorteo, el cual será intervenido por las autoridades y personas que tengan el gusto de presenciarlo.
Los diez números agraciados serán publicados en el número del día 25, a fin de que lleguen a conocimiento de los interesados, y puedan irse preparando para asistir a la juerguecita tauro alimenticia el día de San Pedro.
Gratuitamente asistirán a los toros, al cine si lo hay, refrescarán con nosotros, tomarán vermouth y pasearán en coche.
Todo en beneficio de los diez lectores que sean favorecidos por la suerte y que serán acompañados por el anciano J. Puyitas y Un Cojo sin muleta.
La juerguecita será completa, pues gestionamos que los DIEZ lectores puedan presenciar sin obstáculo de ningún género la fiesta de aviación.
Confiamos que nuestros lectores no se dormirán, como vulgarmente se dice, en las pajas, canjearán los cupones antes de las cinco del día 23 y todos puedan asistir al sorteo en la mañana del 24 festividad de San Juan Bautista.
Cada cinco cupones dan derecho a un vale con el correspondiente número para el sorteo.
Los cupones que no se canjeen antes de las cinco del día 23 no serán validos y advertimos que si entre los agraciados figuran niños, no respondemos de sus travesuras que serán todas a cuenta y riesgo de sus respectivos papás.
Si estos desean la seguridad de las criaturas, pueden mandarlas en compañía de las niñeras que estas serán atendidas con gran solicitud por el anciano revistero J. Puyitas y

Un Cojo sin muleta.
Heraldo de Zamora, 20/06/1913

martes, 12 de junio de 2012

JUICIO POR JURADOS : EL HOMICIDIO DE PIEDRAHITA DE CASTRO.

El 18 de junio de 1913, comienza la vista del proceso por el homicidio acontecido en agosto de 1912 en la localidad zamorana de Piedrahita de Castro.
Durante la celebración del baile en las fiestas de San Roque de 1912 se produjo una violenta reyerta entre los mozos de este pueblo y los del cercano municipio de San Cebrián.
Como consecuencia de la disputa un joven de San Cebrián resultó muerto.

El ministerio fiscal acusa a Cipriano Blanco Nieto, Victoriano Blanco Nieto y Gaudencio González Vecino de ponerse de acuerdo en la madrugada del 18 de agosto de 1912 para agredir a los mozos de San Cebrián que habían acudido a las fiestas San Roque. Cuando dichos mozos procedían a retirarse una vez finalizado el baile fueron alcanzados por aquellos, y tras provocarlos comenzó una reyerta de la que resultó herido Carlos Rapado Aguado, quien fallecería horas después como consecuencia de las lesiones ocasionadas.
Por su parte la defensa de los hermanos Blanco Nieto niega que sus defendidos participaran en dichos hechos. En el caso de Cipriano, ni siquiera se hallaba presente y en el caso de Victoriano, si bien se encontraba hablando con Carlos Rapado cuando se produjo la agresión, no tuvo participación alguna.
La defensa de Gaudencio se expresa en parecidos términos, negando que su defendido, presente en el lugar de los hechos, participara en la agresión.

Durante tres días se desarrolla la vista, en la que los procesados y numerosos testigos son interrogados por las partes.
Victoriano Blanco relata en su interrogatorio con todo detalle como se produjo la agresión, señalando a Gaudencio González Vecino, como autor del garrotazo que le ocasionó la muerte a Carlos Rapado.
Cipriano Blanco niega no sólo que tuviera algo que ver con la muerte de Carlos, sino que ni siquiera se hallaba presente.
Gaudencio González refirió también con todo detalle como sucedieron los hechos, manifestando que el autor del garrotazo fue Carlos Rapado.
José Rapado, padre la víctima, visiblemente emocionado, rememora las últimas horas de su hijo, quien a su llegada tras los incidentes nada dice de estar herido, probablemente porque no concediera a la lesión la importancia que desgraciadamente requería, y una vez cuando la situación se agravó, estando a solas con su hijo éste le manifestó que los tres procesados le agredieron, sin especificar quien de ellos fue el autor material del garrotazo.

Los testimonios de los testigos que son interrogados durante la vista resultan en algunas ocasiones contradictorios. La mayoría coincide al relatar los hechos que los mozos de San Cebrián se encontraban cantando en las inmediaciones de la puerta de la escuela de Piedrahita, cuando llegaron Gaudencio y Victoriano, quienes encendieron unas cerillas para identificarlos para luego amenazarlos con hacerles chichas. Victoriano empuñaba un puñal, Gaudencio un bastoncito y Cipriano una cacha. Después de discutir y en vista de la actitud hostil de los mozos de Piedrahita, los de San Cebrián decidieron retirarse, saliéndoles los primeros al encuentro junto con algunos casados que los animaban a matar a los de San Cebrián, comenzando la reyerta de la que resultó herido Carlos. Varios testigos coinciden en señalar que Cipriano no se encontraba presente en la posterior reyerta, aunque la opinión pública parece confirmar que fue Cipriano el autor del golpe. La mayoría de los testigos afirman no haber visto quien daba el golpe, y algunos de los mozos de Piedrahita señalan haber visto a Gaudencio cómo se aproximaba por detrás de Carlos y atizarle con el palo. Interrogados por la forma y dimensiones del palo, ninguno lo recuerda con exactitud.
Los testimonios confirman que en un primer momento y durante la instrucción se guardo silencio sobre la autoría de los hechos ya que todo el mundo había coincidido en que lo mejor era callar, pues nada se podía hacer por la vida del finado. En este sentido parte de los interrogatorios se destinó a tratar de probar la existencia de una conversación al día siguiente de los hechos, en la casa de Victoriano Blanco, donde éste se encontraba en cama, con el padre de Gaudencio.

Finalmente, las acusaciones analizan minuciosamente los detalles de tan intrincada prueba para terminar suplicando al Jurado que dicte un veredicto declarando culpables a los tres acusados.
La defensa de los hermanos Blanco con plausible acierto rebate enérgicamente todos los cargos solicitando del Jurado que obre en justicia dictando un veredicto de inculpabilidad para Cipriano y Victoriano.
La defensa de Gaudencio, a cargo del letrado Sr. Núñez, con fama de orador elegante, enérgico y fogoso pronunció un discurso en el que analizó la prueba, llegándola a calificar de artificiosa, realizó un estudio profundo de las cuestiones legales planteadas por la acusación y solicitó un veredicto absolutorio para su defendido.

El veredicto fue de inculpabilidad para los tres procesados, no accediendo la Sala a la petición del fiscal de revisión del caso por un nuevo jurado.
La lectura del veredicto y la sentencia fue acogida por el auditorio formado por vecinos de ambos pueblos con religioso silencio.

lunes, 11 de junio de 2012

NUESTRO CONCURSO

Es intensa la labor de promoción y difusión de la corrida de toros que se realiza desde Heraldo de Zamora. Aunque no se produzcan noticias nuevas, el diario no deja cada día de recordar el acontecimiento, repitiendo una y otra vez el mismo mensaje, con la clara intención de crear la suficiente expectación entre los lectores.

Este año, además el periódico, inicia una novedosa técnica de promoción de ventas del diario, insertando un cupón que una vez recortado puede ser canjeado por una participación en un sorteo. El obsequio que será sorteado es una gran fiesta que dirigida por los populares redactores J. Puyitas y Un cojo sin muleta, llevaran a los diez lectores ganadores a los toros gratis en un coche de caballos, les invitarán al vermouth, a un refresco tras el espectáculo y a la función del Teatro Principal.

El cartel de la corrida prevista para San Pedro de 1913 estará formada por Rodolfo Gaona y Chiquito de Begoña, y se lidiaran reses de la ganadería zamorana de Santiago Neches.

CAIRELES Y PITONES

Nuestro concurso.

Nos encontramos en el periodo álgido de la fiebre del cupón y no pasa día sin que acudan a nuestra Redacción centenares de aficionados con la misión de canjear cuarenta o cincuenta cupones por el consabido vale, que les da derecho a intervenir en el sorteo que ha de verificarse el día 24 de los corrientes en el paseo Avenida de Requejo.
El sorteo será un acontecimiento, pues en él se determinará el nombre de los diez lectores que han de asistir gratuitamente a los toros el día de San Pedro, en cuya tarde Rodolfo Gaona, el torero elegante y con quinqué, alternará con el valiente y arrojado matador bilbaíno Chiquito de Begoña.
Estos astros de la tauromaquia actual se las entenderán con seis cornúpetos de la vacada de don Santiago Neches.
Los seis morlacos que mande nuestro paisano, vuelvo a repetir, tienen excelente trapío, son mejor encornados y de arrobas pasan de 28.
Son unos señores bichos que proporcionarán más de un disgusto a la gente de aupa.
El entusiasmo que reina por presenciar este acontecimiento taurino, es indescriptible.
De Toro y Benavente se descolgará el día de San Pedro media población, y en los pueblos de tierra del Vino y Campos no quedará ni un solo vecino que no visite Zamora el día 29 de los corrientes.
El comercio, la industria y la empresa de toros, estén de enhorabuena.
Se presenta buena campaña y hay que aprovecharla.
Viejos, jóvenes y chiquillos, entusiastas de la fiesta nacional, acudirán a la mezquita la tarde del día de San Pedro para ver torear a los inconmensurables diestros Rodolfo Gaona y Rufino San Vicente, dos muchachos con reaños y con un corazón más grande que el pedestal donde descansa la estatua de Viriato.
Hay que ir a los toros aunque nos pongamos a mal con nuestro colaborador Eugenio Noel, acérrimo detractor de las corridas de toros.
Es necesario demostrar que en Zamora hay afición, y que nos agrupamos todos cuando le ocasión llega, para defender los intereses del comercio y la industria que atraviesa hondísima crisis.
Quien no ayude a la propaganda, ni asista a los toros, no es amante de la patria chica.
Dispongámonos a recibir a los innumerables forasteros que se proponen visitar la ciudad de doña Urraca en fecha tan memorable; aplaudir la labor del indio Gaona y del begoñés Rufino, y sacar en hombros ¡¡eh!! al inteligente ganadero y simpático paisano don Santiago Neches.

Un Cojo sin muleta.
Heraldo de Zamora, 18/06/1913

viernes, 8 de junio de 2012

A LOS TOROS EN TREN

Uno de los aspectos mas controvertidos todos los años, en la organización de la corrida de San Pedro era negociar con las empresas ferroviarias, servicios de trenes especiales con horarios cómodos y tarifas de precios reducidos, gestión que resultaba imprescindible para que el número de visitantes fuera lo más numeroso posible ya que era el principal medio de locomoción existente.

Los visitantes en su mayor medida provenían de Salamanca, Benavente, Astorga, Medina del Campo y Toro.
Al coincidir el día de San Pedro en laborable era preciso que el horario del tren permitiera a los viajeros atender sus labores cotidianas y que el tren pasara por dichas poblaciones después de la 12 del mediodía y que llegara a la estación al menos una hora antes de la corrida, estableciendo su regreso dos o tres horas después de la finalizan del festejo taurino.


CAIRELES Y PITONES

¡A los toros!

La Compañía de los ferrocarriles de Medina del Campo a Zamora y de Orense a Vigo ha establecido un servicio especial de billetes de ida y vuelta a precios reducidos entre nuestra capital y estaciones de la línea, con motivo de la tradicional feria de San Pedro y corrida de toros.
Los billetes de ida y vuelta se expenderán los días 26 al 30 y serán valederos para el regreso hasta el día 1.° de Julio inclusive, y los viajeros podrán utilizar los trenes correos, mixtos y especiales.
Costará el billete desde Medina del Campo a Zamora: en primera clase, 12,25, en segunda, 9,15, y en tercera, 6,15.
Desde Toro: en primera, 5,45; en segunda, 4,10, y en tercera, 2 75.
Desde Coreses: en primera, 2; en segunda, 1,50 y en tercera, 1.
El día 29 circulará un tren especial entre Medina y Zamora.
Saldrá del primer punto a las 9 y 20 minutos y pasará por Villaverde a las 9 y 40, por Nava del Rey a las 9 y 55, por Venta de Pollos a las 10 y 29, por Cartago a las 10 y 53; por Castronuño, a las 11, por San Román a las 11 y 28; por Toro, a las 11 y 48, por Monte la Reina a las 12 y 18, por Coreses a las 12 y 39, llegada a Zamora a las 13 y 5.
Este tren regresará al punto de salida a las 9 y 45 minutos de la noche para llegar a Medina a la 1 y 31 de la madrugada.
Los precios de los billetes no pueden ser más económicos y el horario del tren especial, si no es el que se pedía se aproxima a nuestros deseos que son los del comercio y Empresa.
Dentro de breves días se recibirán los carteles del servicio de la línea del Oeste.

Como anuncié días pasados, está en preparación la revista taurina, Caireles y Pitones, que verá la luz pública el día de la festividad de San Pedro, revista que ha tenido extraordinaria acogida entre el Comercio e Industria zamorana.
Caireles y Pitones publicará los retratos de los matadores Rodolfo Gaona y Rufino de San Vicente, Chiquito de Begoña, a gran tamaño, y de las ocho páginas, cuatro serán destinadas a la sección de anuncios.
Entre los anunciantes de Caireles y Pitones celebraremos otro sorteo, y este que no es ni por cupones, puesto que el agraciado tendrá derecho a anunciarse gratuitamente por un mes en HERALDO DE ZAMORA.

El día 30 veremos quien es el afortunado.

Un Cojo sin muleta.
Heraldo de Zamora, 17/06/1913

jueves, 7 de junio de 2012

¡VAYA CARDO!

Aunque ya unos días antes Heraldo de Zamora había publicado que los programas anunciadores de la corrida de toros estaban en circulación, resulta curioso, pero repiten nuevamente la noticia.

En cualquier caso, los programas anuncian una gran corrida de toros para la tarde del día 29 de junio, festividad de San Pedro.
El año pasado se confeccionó un cartel con dos corridas de toros, organizadas por accionistas próximos al Círculo Mercantil. Tras no pocos imprevistos que debieron sortear debido a las cogidas de Ricardo Torres, Bombita y Cocherito de Bilbao, finalmente se pudieron organizar las dos corridas previstas, aunque no se pudo mantener la altura del primer cartel, lo que provocó que el resultado económico de la empresa organizadora fuera negativo.

Este año, es una empresa particular de Bilbao quien ha arrendado el coso de la explanada del matadero y ha contratado para un solo festejo al mejicano Rodolfo Gaona y a Rufino San Vicente, Chiquito de Begoña.

Los precios oscilarán en sombra desde 12,90 pesetas, localidad más cara, para una entrada de barrera hasta 4,80 en grada, mientras que en sol, la barrera costará 4,05 pesetas , y la localidad más barata será la de grada que costará 3 pesetas.

CAIRELES Y PITONES

¡Vaya cardo!

Con una profusión nunca conocida, ayer comenzaron a circular los programas al cromo, anunciadores de la gran corrida de toros que ha de celebrarse en nuestro circo taurino, el día de San Pedro.
El derroche de papel fue colosal y seguramente pasarán de diez mil los cuartelillos que fueron enviados a provincias y pueblos limítrofes.
En los programas se dice que el gran Rodolfo Gaona y el valiente bilbaíno Rufino de San Vicente, Chiquito de Begoña, se las entenderán con seis brutos astados de la ganadería de don Santiago Neches, que ostentarán divisa amarilla y blanca.

La animación que reina por asistir a la corrida es extraordinaria y la Empresa tiene en cartera infinidad de pedidos de localidades de preferencia que no sabe si podrá servir por ser muchos los compromisos adquiridos.
De Salamanca, Valladolid, Astorga, Benavente y Toro han escrito también manifestando deseos de asistir al festival taurino y presenciar las proezas que realicen con los toros de don Santiago, los arrojados diestros Gaona y Chiquito de Begoña, que vienen a Zamora, dispuestos a trabajar y dejar el pabellón como las propias rosas.

Es decir, Rodolfo y Rufino, maestros en el arte de Cúchares, establecerán en el coso de la explanada del Matadero, cátedra taurina la tarde del día de San Pedro.
Así lo tienen ofrecido los dos astros y como son hombres pundonorosos cumplirán al pie de la letra la oferta y la afición quedará satisfecha y cantará un himno a la Empresa, que gracias a su arresto, tenemos toros el día 29 del corriente mes y el comercio una fuente de ingreso con la que no podía contar de estar cerrado el circo taurino.

¡A los toros! Prepárense a tomar localidades, que serán puestas a la venta a la mayor brevedad.

Nosotros tenemos ya encargados los diez tendidos para los cofrades de la Caravana de HERALDO DEL ZAMORA.
¿Quiénes serán los agraciados? La suerte lo dirá el día 24 de los corrientes, día que se verificará el sorteo de nuestro concurso.
¡A los toros! y en coche llevará HERALDO DE ZAMORA a los diez lectores que sean agraciados con la suerte.
Bienaventurados los que el día de San Pedro asistan gratuitamente a los toros en compañía del anciano J. Puyitas y de

Un Cojo sin muleta.
Heraldo de Zamora, 16/06/1913